Mucha gente piensa que las cucarachas sólo aparecen en verano y desaparecen automáticamente en inverno. Los clientes nos llaman sorprendidos: “¿Cómo puede ser que haya encontrado pequeñas cucarachas en mi cocina a finales de diciembre? No se supone que esta plaga sólo existe en verano?” Ojalá fuera así! Si viene cierto que a las cucarachas les encanta el calor veraniego, igual que a Rita Barbera “el caloret”, ¡también disfrutan mucho de la calefacción en nuestros pisos a lo largo del invierno! Y no es nada raro hacer una fumigación de cucarachas en diciembre o en enero, porque también hay calor en la ciudad en estos meses.
En efecto, solemos mantener una temperatura que rodea los 20 grados en nuestras viviendas, por lo cual las cucarachas pueden sobrevivir perfectamente a los días más fríos del año. En la cocina, el calor generado por el motor de la nevera y los aparatos eléctricos les proporciona un entorno ideal todo el año, además de tener agua y comida: un verdadero paraíso para las cucarachas! Si estamos calentitos en la sala, con la calefacción encendida o un fuego de chimenea, los insectos encuentran las mismas condiciones climáticas en enero que en agosto…
Además, no suele hacer mucho frío en Barcelona en invierno, por lo cual las plagas de cucarachas no desparecen. Y con los efectos del calentamiento global, este invierno 2016 nos ofrece temperaturas de primavera, ¡que son el aliado perfecto de las cucarachas! Tanto en la calle como en los edificios, los insectos no pasan frío, y por lo tanto, siguen molestándonos a lo largo del invierno.
Ahora no os sorprenderá saber que nunca hemos hecho tantas fumigaciones de cucarachas en Barcelona como este invierno, comparando con los años anteriores. Antes la gente asociaba la aparición de las cucarachas con la llegada del verano, pero hoy en día, no hay tregua: las plagas se han extendido de tal manera por la ciudad de Barcelona que no desaparecen en ningún momento del año.
Muchos barrios de Barcelona se ven afectados por plagas de cucarachas de forma casi permanente, por culpa de las infraestructuras antiguas y de una falta de mantenimiento urbano, consecuencia de los recortes de los últimos años. Por lo tanto, es aconsejable realizar una fumigación para eliminar las cucarachas en cuanto aparecen: en pocas semanas, el problema ya se habrá convertido en una plaga mucho más difícil de controlar, sea en verano o en invierno.